Las madres de los niños hospitalizados señalaron que en el centro de salud les piden llevar insumos básicos como inyectadoras y guantes. Relataron que deben hacer los exámenes en instituciones privadas.

Yinmarys Marín, madre de una pequeña paciente con hidrocefalia contó que tuvo que vender objetos personales como nevera y cocina para poder costear todo lo referente a la situación de salud de su hija, Viky, denominada «la diva». La primera operación a la que sometieron a la pequeña costó 500 dólares, posteriormente ha gastado 300 dólares más; afirmó que ha recibido ayuda de fundaciones para hacerle frente a los elevados costos.

«Hay que volver a pagar serologías, más la sangre para quirófano, asimismo, tubos de ensayo, inyectadoras, yelco, todo eso me lo piden»; expresó que su otra hija perdió el primer lapso del colegio porque todo el dinero y la atención se ha ido en la recuperación de Viky.

Dormir en el piso o en las sillas del lugar son algunos de los sacrificios de estas madres para estar cerca de sus hijos durante este proceso; Yohana Añez, otra madre joven que se encuentra con su hija en el área de hospitalización del principal centro de salud de la región central, contó que los exámenes se los piden en clínicas «ya que es más seguro el resultado», «ha sido muy costoso, no esperaba esto, los días aquí han transcurrido fatal, nos ha tocado hasta montarnos en camioneticas a vender, hemos pagado hasta 500 mil bolívares por un examen», dijo.

Añez mencionó que duerme en una silla pero aseguró que hay muchas personas que duermen en el piso «yo no puedo porque a mi niña le sube la fiebre muy rápido». Las madres y familiares de los niños que se encuentran recluidos aseguraron que logran conseguir insumos gracias a las fundaciones que prestan ayuda en este lugar.