Las autoridades de distintos componentes han sido alertadas acerca de un inusitado reguero de alcabalas de choros vestidos de Guardias Nacionales.

En los últimos días un detective y tres antisociales cayeron muertos en estos amañados dispositivos de seguridad en diversas carreteras del país.

Una andanada de denuncias le precedieron a los trágicos eventos que se extienden por Aragua Carabobo, Miranda y Anzoátegui. Modalidades delictivas que han resucitado en las últimas semanas.

El pasado fin de semana el secreto a voces de hizo realidad. En la carretera Barcelona-Anaco, frente al distribuidor Maturín, una comisión  de la Guardia Nacional Bolivariana se topó con unos falsos colegas.

Al detener la velocidad los atacaron a tiros. Tras el intercambio de disparos murieron tres delincuentes que vestían uniformes militares. Los fallecidos fueron identificados como José Piñero Sánchez (24 años) y Franklin Salas Rivas (37).

Un tercer asaltante de carretera carecía de documentos de identificación. Otros dos ladrones desaparecieron en medio del tiroteo. Les incautaron una escopeta y dos armas de fabricación casera.

Los oficiales del Destacamento 521 señalaron que los hampones abatidos formaban parte de una banda conocida como Los Tiranos. Se  dedicaban al robo de vehículos, secuestro y extorsión al sur de  Anzoátegui. Ahora decidieron incursionar en el negocio de las alcabalas.

Los delincuentes detenían a los conductores de vehículos para extorsionarlos. Después los amenazaban de muerte para que abstuvieran de denunciarlos. La mayoría de las víctimas callaba y atribuía la acción a la descomposición de los cuerpos de seguridad.

El reguero de Miranda

Sin embargo, algunos agraviados cansados de ser asaltados acudieron al Destacamento 521 para exponer sus quejas. Temían represalias. Otros choferes han denunciado un reguero de alcabalas en la Carretera Nacional Troncal 9, pero los asaltantes no han podido ser detenidos.

También el fin de semana asesinaron a tiros al detective del Cicpc Anderson Graterol de 31 años en un improvisado retén policial. El crimen lo perpetraron tres delincuentes uniformados en la carretera Cúa-San Casimiro del estado Aragua.

El funcionario iba acompañado de un amigo, quien logró sobrevivir para narrar lo acontecido. Los criminales despojaron al detective de su arma de reglamento y de sus credenciales.

Fuentes policiales atribuyen el fenómeno a la escasa vigilancia policial y al deficiente alumbrado público en diversas arterias viales del centro del país. El Carabobo suelen reportarse robos similares en la carretera Mariara-Maracay. Los asaltos son atribuidos a miembros de la banda conocida como Los Sanguinarios de Mariara.

En el sur de Aragua y parte de Guárico operaban bajo esta modalidad los antisociales que pertenecieron a la banda de alias Juvenal, quien fue abatido en un enfrentamiento.

ACN

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