En el mundo de la reproducción veterinaria en equinos, una de las biotecnologías que mayor uso tiene es la Inseminación Artificial. Esta técnica es utilizada en cualquier especie, e incluso en los seres humanos, teniendo un impacto en la sociedad muy importante.

A través de los años el uso de esta técnica ha sido mejorada con la finalidad de que sea lo más exitosa posible, para obtener como resultado final la preñez en la hembra. En otros artículos publicados por mi persona he hablado un poco más sobre la Inseminación Artificial.

Como cualquier otra técnica depende de varios factores, tanto externos como internos en cuanto a la yegua, o en su defecto del caballo macho, y a su vez del profesional que lo practica.

La inseminación artificial, abreviada por sus siglas en IA, debe ser realizada de una manera muy cuidadosa, detallista y más aséptica posible para aumentar las probabilidades de éxitos. Sin embargo, en este momento quiero plasmar un punto muy importante a la hora de realizar la inseminación en una yegua, y es sobre el momento de la inseminación, ya que si queremos cruzar el macho con la hembra de una forma natural o mediante la técnica mencionada, debemos conocer el momento óptimo para dicho acto.

A lo largo de mis estudios sobre el comportamiento del tracto reproductivo de una yegua y las comparaciones que he hecho con otros estudios realizados nos damos cuenta que existen varios factores que ayudan a determinar el momento idóneo para depositar el semen del caballo en el útero de la yegua.

En este artículo en particular quiero resaltar uno de los factores que para mí es de vital importancia -junto con otros aspectos- al detectar el momento de ovulación, el cual es el Edema Uterino. Lo definimos como el acúmulo de líquido, en este caso fisiológico, que se encuentra en el cuerpo y cuernos uterinos.

En las yeguas cuando se encuentran en su etapa fisiológica del estro (celo) -etapa donde acepta al macho-, la hormona predominante en su circulación es el estrógeno, el cual genera un aumento de irrigación en el tracto reproductivo y permeabiliza la entrada de líquido al útero, generando así el llamado “Edema Uterino”. Esta entrada de fluido al lumen del útero tiene como finalidad generar un medio óptimo y así preparar a dicho órgano para la fecundación.

Brinsko et al., 2010, considera que a través del ultrasonido, muchos parámetros como desarrollo folicular, presencia de fluido patológico en útero, presencia de cuerpo lúteo (CL) y Edema Uterino, puede ser monitoreado durante todo el ciclo estral, ayudando entonces a identificar y poder determinar el momento de ovulación.

En este sentido, para Reilas et al., 2015, la interpretación morfológica característica del endometrio en la ecografía constituye una parte importante para establecer una estimación precisa de la etapa del ciclo estral. La aparición de edema precede el inicio del comportamiento estral en 1, 2, o 3 días, aunque el comportamiento sexual en general, persiste por 24 a 48 horas después de que el edema ha desaparecido.

El sistema de puntuación para Edemas desarrollado por Samper, 2009 ha sido una herramienta muy útil para determinar el tiempo apropiado de ovulación en yeguas. A continuación se describen los parámetros:

• Útero moderadamente suave, con ligera presencia de ecogenicidad, aparecen folículos de 25-35mm.
• Primer signo real de edema, la yegua está entrando en estro. Pliegues endometriales alargados, fácil identificación. Folículos mayores de 35mm.
• Pliegues endometriales de fácil visualización, folículos de 38mm o más, apariencia de “rueda de coche”. Indicativo de ovulación cercana.
• Pliegues endometriales aumentados, la apariencia de “rueda de coche” sigue, folículos mayores a 40mm. En esta etapa los edemas comienzan a decrecer y la ovulación está más cerca.
• Es considerado anormal. Pliegues endometriales engrosados, la apariencia de rueda de coche está perdida. Persisten incluso después de ovular y puede seguir acumulando fluido.

Según Brinsko et al., 2010 en su Manual de Reproducción Equina, los pliegues endometriales de la yegua en el estro se convierten prominentes, generando una apariencia heterogénea a la ultrasonografía. La clasificación del edema endometrial puede clasificarse también en, 0 (no edema), 1 (ligeramente), 2 (moderado), 3 (severo).

El edema uterino puede ser indicativo de alguna patología cuando observamos uno o más de los siguientes aspectos: presencia de un claro edema endometrial y un folículo dominante de gran tamaño 14-15 días post ovulación, fallo en la reducción del edema cuando la yegua alcanza la ovulación o 24 horas post ovulación, presencia de un hiperedema (ED5 o mayor) en un ciclo estral normal, aumento significativo del edema 12-24 horas post servicio y ausencia del edema uterino durante el estro (McKinnonet al. 1988, Pelehach et al. 2002, Squires et al.1988).

Miro et, al., 2004 explica que las zonas hipoecogénicas en la imagen ultrasonográfica, son el resultado del fluido de la submucosa (edema). El grado de Edema Uterino aumenta con el crecimiento folicular, los edemas generalmente se reducen o paran un día antes de la ovulación.

En un trabajo publicado en el 2012 por la Revista Médica Veterinaria de Colombia, a 24 yeguas de raza colombiana, entre edades de 4 a 14 años, las cuales fueron inseminadas y posteriormente monitoreadas mediante ecografía desde el día de su ovulación hasta 40 días después, evaluando diferentes parámetros; entre ellos el grado del Edema Uterino, teniendo como resultado al momento de la ovulación que, el Edema Uterino predominante en las yeguas fue clasificado como de grado cero (0). El día de la ovulación (día 0) se encontraron 2 yeguas con edema grado 2 y una yegua con edema grados 1 y 3, el cual desapareció durante los días posteriores.

Luego de conocer el estudio mencionado anteriormente, podemos compararlo con los resultados obtenidos por mi persona en 8 yeguas raza cuarto de milla donde se pudo observar que al momento de la ovulación 5 de ellas presentaban edemas grado 1, mientras que el resto presentaba grado 2. Además,  una de ellas tuvo la presencia de un folículo de 39mm y un edema grado 3, y 24 horas después poseía un folículo de 44mm y edema grado 2 en proceso de regresión.

Luego de haber observado la constante en el comportamiento del Edema Uterino en ambos trabajos, al momento de la ovulación es vital conocer la importancia de dicho Edema para deducir el momento de la ovulación, y de esta manera, precisar el momento ideal de servicio en la yegua. Por otra parte, se observa que existe una relación muy estrecha entre el crecimiento folicular y el comportamiento del Edema, teniendo un desarrollo creciente y luego decreciente a medida que se acerca la liberación del óvulo.

Médico veterinario Eduardo Prado Carroz

Universidad del Zulia, Facultad de Ciencias Veterinarias (FCV). Venezuela

Agremiado del Colegio de Médicos Veterinarios del estado Zulia, nro. 2483

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