Seguramente para más de 21 mil aficionados presentes en el Comerica Park no le agradó en nada el boleto que recibió de forma intencional su máximo ídolo en el cierre del octavo tramo, pero para Miguel Cabrera le boleto intencional “es parte del juego”.

Cuando quedan por delante 150 juegos de la temporada regular, “Miggy” está a un hit de los 3.000, 12 de ellos los ha dado entre los primeros 12 encuentros de Tigres de Detroit, que incluye dos desafíos con tres, incluido el trío de cohetes ayer miércoles, pero igual su divisa perdió por segudo juego corrido ante los “Bombarderos del Bronx” y el cuarto en fila.

Este jueves 21 de abril fue dominado en tres ocasiones por Jordan Montgomery, que incluyó dos ponches seguidos, de los seis que le propinó a los “bengalíes”, pero igual cargó con la derrota, por la rayita que aceptó en seis entradas.

Boleto intencional “es parte del juego”

Pero para el octavo innning, con la partida “pequeñita” (1-0), Cabrera llegó al plato por cuarta ocasión, ahora su oponente era el zurdo Lucas Luetge, quien venía de dominar al dominicano Jeimer Candelario lo dominó para doble matanza, el manager de Nueva York, Aaron Boone le dio las cuatro malas, para llenar las bases.

La acción fue suficiente para que los más de 21 mil aficionados (21.519) abuchearon un rato a Boone, algo que quizás duró el tiempo desde el home hasta la inicial que duró Cabrera en llegar;  luego voltear y pedir que pararan con la frase “Estamos ganando 3-0, estamos bien”.

Luego vino el doble de Austin Meadows que amplió las ventaja que a la postre fue como terminó la pizarra.

“Yo sé que la historia es bien importante”, dijo Cabrera antes del triunfo 3-0 de los Tigres sobre los Yankees en Comerica Park, “pero primero necesitamos ganar. No se trata de mí. Se trata del equipo”.

“Esto es béisbol, ¿saben? Después de mi venía un zurdo”, explicó Cabrera. “Darme el boleto intencional, eso es parte del juego. Me fui de 3-0, pero ganamos. Maravilloso”, atizó.

“Miggy ha manejado las cosas así”

“Quería asegurarse de que todo el mundo tuviese perfectamente claro que ganar el juego era la prioridad”; dijo el manager A.J. Hinch.

“Miggy ha manejado las cosas así durante la búsqueda del jonrón 500, esta del hit 3,000. A Miggy lo que le importaba hoy era ganar. Necesitábamos ganar”; agregó el timonel.

Siempre con sus bromas

“Es totalmente una decisión de béisbol. Pero no hay dudas de que hay un poco más de sentimientos, sabiendo cuál es la situación. Al final del día, tu tienes que hacer lo que piensas es correcto dentro del contexto del juego”; explicó Aaron Boone.