Opinión
Anuncio de un alcaraván XIX
Anunció de un Alcaraván XIX: Por Milagros Rodríguez.- Colombia al desnudo (O la envidia del vecino) Parte de Guerra. Por muchos años nos vendieron la idea de una Colombia próspera; segura para el buen vivir y la inversión y con un turismo envidiable; con una educación de primer mundo y un sistema económico, político y social; que haría a cualquier europeo o norteamericano venirse a trabajar y crecer en estas tierras santaduquences; y ahora más por la diáspora que estamos viviendo entre ambos países.
El aparato publicitario en sport de 30 segundos consistía en un lema “ven a Colombia; lo más que puede pasar es que quieras quedarte”. La realidad se ha estado poco a poco mostrando y con el pasar de los años; esa idea del paraíso en el vecino país se está desmontando. Colombia no es como te la pintan, es un país con sus problemas y que la oligarquía se ha encargado de negarla; por todos sus medios de comunicación.
La “Hermana República” es un país en guerra civil desde 1948. Tras el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán en el albor de unas elecciones que se vislumbraban liberadoras; para los millones de explotados por la más antigua oligarquía de Suramérica; empezó una guerra entre los de abajo por sus tierras y los terratenientes y latifundistas; que usaron y usan al Ejército y los paramilitares para mantenerse en el poder. Y no es nada nuevo, luego de la disolución de la Gran Colombia, el país neogranadino ha tenido más de nueve guerras civiles; la mayoría de ellas por el control político entre liberales y conservadores.
En estos últimos 70 años ningún gobierno del vecino país se ha ocupado de ofrecerle calidad de vida a sus habitantes; por el contrario, en su guerra intestina, los que siempre han sido víctimas son los pobres; los campesinos, los obreros, los que el sistema desecha por no tener apellido o clase social de representación. Las cifras son horrorosas, más de 5 millones de desplazados internos y otros 5 millones (mas) externos; de los cuales la mayoría se ha venido a Venezuela y han sido recibidos y se les ha dado cobijo y apoyo; como si fuesen un venezolano más pero los ojos internacionales esta puesto en Venezuela.
Desplazados por los sembradíos de coca
Y es que lo horrendo de esa situación es que los hermanos colombianos se desplazan; por la constante y apabullada invasión de sus tierras de los paramilitares para convertirlas en sembradíos de coca; y así alimentar el gran hambre que tiene el principal consumidor de cocaína del planeta (EE.UU.); Y para nadie es un secreto que la economía Colombia es una economía del narcotráfico.
Por algo tienen más de nueve bases militares gringas allá. Y los gobiernos del vecino país en su débil lucha contra este flagelo; se embarcan en una campaña atroz de decir que están luchando contra el narcotráfico; pero la realidad es que han asesinados sistemáticamente a miles de campesinos y pobres vistiéndolos de guerrilleros. A esos les nombraron “falsos positivos”. Y la cantidad de fosas comunes encontradas dan cuenta de una realidad espantosa; que tiene más de 150 mil víctimas. Pero para el gobierno de Iván Duque, Venezuela les está violando los derechos humanos a los desplazados; quienes vienen indocumentados a nuestro país y que terminan trabajando para los paramilitares y mafia institucional de Cúcuta. Mientras Colombia no se reconozca como un Estado fallido; no cesarán los problemas asociados al paramilitarismo y mafia institucional; y Venezuela en su acto de soberanía para defender a su pueblo, irá cerrando toda la frontera con Colombia (es lo que ha estado sucediendo de tres años para acá).
Lo más cumbre de todo es que todos los medios de comunicación de Colombia niegan todo; mienten, tergiversan y los colombianos no se enteran de nada; y el ataque hacia Venezuela se arrecia. Pero no es de extrañarse, los medios le pertenecen a la oligarquía, algunos de ellos a Santos y a Duque.
La verdad es que mientras su cancillería siga declarando; y viajando por el mundo a hablar mal de Venezuela, están lejos de resolver sus conflictos internos.
ACN/MR
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