Gobierno aumentó salario integral aunque no lo publica en Gaceta Oficial

El Gobierno aumentó el salario integral (sueldo mínimo y bono de alimentación); pero esta vez no lo hizo por el canal regular, que no es otro que la Gaceta Oficial, según lo han reportados varias agencias noticiosas del país, refiriéndose a los tuit colgado por la ONG Acceso a la Justicia.

Hasta el sol de este sábado 13 de noviembre, aún no hay nada oficial, pero la ONG señala: “El régimen aumentó «de hecho» el salario mínimo a Bs 1.200.000, sin anuncio oficial o publicación en Gaceta Oficial, tanto para el sector público y privado, pensionados o jubilados”, dice un los cuatro mensajes montados en su Twitter (@AccesoaJusticia) el pasado 11-N.

Otro medio, Punto de Corte, señala que el aumento comenzaría a correr desde octubre, que también incluye el aumento en el llamado bono de alimentación, por la misma cantidad; que al cambio actual al dólar estadounidense del Banco Central de Venezuela sería de 3,71 del billete verde, sacando la cuenta a lo que costará desde el próximo lunes.

Gobierno aumentó el salario integral

“¿Qué pasó con la promesa del medio petro? En agosto 2018 el salario era equivalente a medio petro, unos 30 $. Ahora el nuevo salario mínimo representa apenas 2,7 $. Se trata de otra promesa incumplida del «presidente obrero”; se refirió la ONG tocando solo el salario mínimo de 2.400.000 bolívares.

Por su parte, Banca y Negocios indica que el aumento es corroborable en los sistemas de cobro de impuestos parafiscales como el Banco Nacional de Vivienda y Habitad (Banavih), que ya para octubre no arroja resultados al ingresar el antiguo sueldo de 400.000 bolívares. Sin embargo, si lo hace al ingresar el nuevo monto de 1.200.000 bolívares.

“¿Realmente hubo aumento? Hubo un incremento nominal, más bolívares que compran menos, inferior al otorgado en mayo al llevarlo a dólares y muy lejos del prometido medio petro o del salario medio del venezolano antes de llegar Maduro al poder, dice la ONG especializada en temas jurídicos, sociales, y de Derechos Humanos.

Comenzó desde el 1 de noviembre

Igualmente, Oscar Meza, director de Cendas-FVM, declaró que el aumento salarial comenzó a ser depositado a los pensionados desde el 1 de noviembre.

Meza indicó que los trabajadores públicos también cobraron su mensualidad por anticipado; tal como lo anunció Maduro en cadena y el cual fue divulgado en redes sociales por parte de la Onapre.

Asimismo, señaló que la Gaceta Oficial podría estar saliendo en los próximos días; que el Gobierno no lo anuncia en cadena desde hace tiempo porque sabe el impacto que tiene el salario mínimo en los precios que han pasado a ser aumentos nominales.

El problema de no salir en Gaceta

Sin Gaceta Oficial, ningún agente económico podría ser obligado a pagar este nuevo salario mínimo de facto; aunque ya cuenta para efectos parafiscales.

De todas maneras, el salario mínimo ya no es un indicador útil, para la determinación de las compensaciones en el sector privado.

Hasta ahora, los aumentos salariales en el gobierno de Maduro habían llegado, al momento de ser declarados, a un equivalente de siete dólares mensuales; esta vez, medido en divisas estadounidenses, alcanza a un 50% menos, aproximadamente.

42 aumentos desde 2013

“Desde febrero de 2013 Maduro ha aprobado 42 aumentos. El salario mínimo antes de él tuvo mejores momentos: en julio de 2001, equivalente a 417,61 US$; mayo de 2008 unos 383,89 $. También tuvo peores, como octubre 2020 que bajó hasta 0,78 centavos de $”; dice la ONG Acceso a la Justicia.

Todos los ajustes de ingreso básico de este período han sido completamente ineficaces para apoyar el poder de compra de la población; pero este -hecho de forma subrepticia- es, sin duda, el más ineficaz de todos.

Señalan que Maduro recurrirá, vista la estrechez financiera de su administración, a un esquema de bonificación variable, tanto para los empleados públicos como a los beneficiarios del carnet de la patria; de hecho, dijo que está preparando sorpresas para el mes de diciembre, lo que permite suponer que habrá un mayor número de asignaciones, aunque unitariamente no superen el monto de dos o tres salarios mínimos, como mejor escenario, para lo cual tendrá que relajar su política de restricción de liquidez.

El salario mínimo, como el bolívar, es una ficción económica que determina una mayor informalización laboral en el país.

ACN/MAS/Agencias

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